Los ensayos de presencialidad en las carreras que dicta la UNT están en marcha. En el caso de Ciencias Exactas se aprecia en los exámenes -parciales y finales- que están tomándose en algunas materias. Para eso la Facultad viene preparándose desde el año pasado y durante enero concretó una serie de aprestos imprescindibles en el edificio. Se higienizaron las instalaciones con líquidos sanitizantes, pintaron las dependencias, limpiaron las cisternas de agua y colocaron señalética. “Además, habilitamos tres puestos de control, en el que se toma la temperatura a los docentes y alumnos para llevar un registro”, explicó el decano Miguel Cabrera. “Para concretar todo esto el aporte de los no docentes fue fundamental”, agregó.
En los anfiteatros se aprecia la distancia protocolar a la que se ubican los estudiantes y en algunas aulas los pupitres se fijaron con tornillos al piso, de modo que no puedan juntarse. También está habilitado el acceso a los laboratorios, con las medidas aprobadas por el Conicet.
“Nos sorprendió la cantidad de ingresantes. Tenemos 1.300, un 20% más que el año pasado -destacó Cabrera-. Para ellos se dictó el habitual curso de ingreso, esta vez de modo virtual. Es un módulo que tiene dos objetivos: nivelar a los chicos en matemáticas y acompañarlos para que afiancen el pensamiento abstracto”.
“A mediados de marzo comenzarán las clases para primer año, con un sistema híbrido -agregó-. Lo virtual se complementará con lo presencial en las materias que así lo requieran”.